pimenton

Fotografía: Juan Carlos Mendizabal Fierro

Así como las flores te alegran el espíritu, los frutos cultivados en huerto propio, te solazan el alma y te proporcionan profunda alegría. Cada mañana su imagen te levanta y apresurado sales a contemplar si creció o cambió de color. Un Pimentón, solo uno. Al que cuidas y contemplas diariamente, te hace la vida diferente. Es cómo cuidar un niño. Es un ser viviente que acompaña tu vida día a día.